Banner
#FormadoPorSusManos #SusPromesasSeCumplen #BendicionGeneracional

8 nov 2016 8pm EST EstudiandoLasEscrituras On-Line vía ZoomSalmo 119:73-96

  • #FormadoPorSusManos, Salmo 119:73-80
  • #SusPromesasSeCumplen, Salmo 119:81-88
  • #BendicionGeneracional, Salmo 119:89-96

Continuamos seleccionando de c/estrofa 3 palabras/expresiones que nos llamen la atención y las agregamos a la lista de oración. Ahora deberíamos tener 36 y si dedicas 1 minuto a c/u, tu tiempo de oración debería rondar los 40 minutos.

Al considerar que hemos sido formado por sus manos, Dios nos conoce por dentro (Sal.139.13-16) y por fuera (Sal.139.1-4), antes de que hablemos Él ya conoce lo que vamos a decir (Sal.139.13). Es más, nos conoce desde antes de ser formados en el vientre (Jer.1.5), no nos deja (Sal.27.10) ni abandona la obra de sus manos (Sal.138.8). Estas palabras compartidas entre los que participaron en el estudio, reflejan nuestra vida: me diste forma, dame vida, fidelidad, aflicción, permanecer en tu palabra, esperanza, consuelo, me verán, misericordia, mandamiento, juicio, compasión, hazme entender, regocijo, tu palabra, mi delicia, aprender, corazón íntegro.

Cuando esperamos según su palabra sus promesas se cumplen. Pero para recibir esa bendición, estamos sujetos a la obediencia. La espera puede ser larga pero Dios cuida de nosotros mientras pasemos por ese desierto (Neh.9.20-21), no importa cuánto tiempo sea, no nos desampara (Jos.1.5). Clama por las bendiciones y no te sueltes de Dios (Gn.32.26), agárrate de Él. Su palabra está llena de promesas y cuando no dejamos sus mandamientos, veremos el cuidado de Dios. Mira con detenimiento Is.41.9. Muchas expresiones reflejan nuestro sentir y condición así como nuestro clamor a Dios: desfallecer por tu salvación, esperar en tu palabra, espero ser consolado, no me olvido de tus estatutos, juicio contra los que me persiguen, tus mandamientos son verdad, ayúdame, no he dejado tus mandamientos, vivifícame.

Tenemos la promesa de que su palabra permanece para siempre, Dios ha sido fiel de generación a generación. Si lo ha sido conmigo, lo será para los míos, para toda mi descendencia, mis hijos, nietos y los siguientes. La bendición generacional se cumple por sus promesas. En momentos de aflicción sucede algo tremendo cuando te detienes y te acuerdas de la ley de Dios y te gozas en ella. Ocurre un proceso de vivificación en tu vida y te levantas de nuevo. Recuerda cada día que sus misericordias son nuevas (Lam.3.22-26) y que cuando buscamos sus mandamientos, la mano de Dios se manifiesta sobre ti. Recuerda una vez más que tu porción es el Señor, espera en él, veras su mano.

Dios te bendiga.