Adoración – A Dios sea la gloria

Compartiendo la Cena del Señor, 1 Corintios 11.23-26 en las naciones.

• #LaRecompensaAsuTiempo
• #CuandoLaMenteTeTraiciona
• #ElAyunoTieneSuEfecto

Martes 5 Sep 2017 8pm EST Estudiando Las Escrituras On-Line vía Zoom, Ester 6.1-14

Amán en su propia maldad, su mente le traiciona y revela lo que hay en su corazón, quería ser tratado con reconocimiento, probablemente frustrado de no ser alabado. En su pensamiento llena de envidia piensa: rey dame lo mismo que tú tienes, tus ropas reales, tu caballo, tu corona real, luego que todos se enteren lo grande que soy, exhíbeme (6.8-9). Viene el momento de la sorpresa, la recompensa viene a su tiempo (6.10) Amán tiene en mente pedirle al rey que ahorcara a Mardoqueo pero “la tortilla se le voltea”, el ayuno está surtiendo efecto, quizás más de lo que esperaban, ayunaron por la vida de los judíos que tenían decreto de muerte pero los judíos sin saberlo reciben “su corona” o el premio que el malvado quería para sí mismo. Dios honra a quienes le honran pero al altivo, mira de lejos. Al soberbio le espera su retribución (Mt.23.12, Lc.18.14). ¿Cómo se sentiría Amán vistiendo a Mardoqueo? (6.11). Mardoqueo regresa a la puerta del rey y Aman a la puerta de la vergüenza (6.12), puerta que lo llevara a su propia destrucción. Aunque el decreto a muerte haya salido en gaceta oficial, eso nunca será obstáculo para el mover de Dios por un pueblo que ayuna, clama, ora.

Ahora la propia esposa de Amán le vaticina (profetiza destrucción), le dice la verdad que no quería escuchar (6.13). Después de esas palabritas de la esposa, la angustia carcome a Amán por dentro y tiene que ir a presentarse al banquete del rey, su última cena. Se presentan los oficiales del rey a su casa a escoltarlo para su banquete. Podemos ver la intervención de Dios cuando su gente ayuna con corazón quebrantado y humillado delante de su presencia (4.16): Dios toca al Rey Asuero, lo inquieta, le quita el sueño (6.1) y le trae a la memoria algo que estaba pendiente (2.21-23) y se acuerda que le habían salvado la vida, pero a Dios no se le olvida nada (Heb.6.10). Los “Bigtán y los Teres” serán descubiertos (2.21) y pagarán su precio (2.23).

Dios puede detener un ambiente de muerte y revertirlo en vida. Dios revela el plan del maligno (Mt.10.26, Lc.12.2, Mr.4.22) y le da fuerzas a su pueblo para que le busquen y se preparen para actuar. Dios aclarara lo oculto de las tinieblas (1Cor.4.5). Y si no te han reconocido por tu trabajo, lo que has hecho y has mantenido tu vida en santidad, recibirás tu alabanza de Dios. Gloria sea a su nombre.

Parodia de la esposa de Amán para su amado esposo tomada del versículo 6.13:

“Ay Amán, que mal te veo. Ay Amán, lo que te espera. Ay Amán comenzaste a caer, ay Amán, delante del que queráis matar. Ay Amán, la horca que hiciste tiene el tamaño justo de tu cuello, te quedó a la medida. Ay Amán ahora has sido avergonzado. Ay Amán, prepárate para tu última cena. Ay Amán, tu caída es segura, hasta aquí llegaste. Ay Amán, te metiste con un siervo de Dios. Ay Amán, se acabó todo para ti. ¡Amán apúrate que se te enfría la comida y la mesa está servida!”.

Dios les bendiga y les guarde.